Algunos años antes de despedirme definitivamente de todos, uno de mis hijos puso cierto empeño en enseñarme algo de las nuevas tecnologías. Me sentó delante de un ordenador y me dijo: "Intenta dibujar con un ratón". No lo conseguí, pero no creais que me extrañó la propuesta: casi cincuenta años antes, uno de mis personajes había conseguido cazar conejos con un pingüino, como se puede ver aquí debajo.
En fin: que dejo el trabajo de bloggers a mis hijos Paco y Rafa y les transmito mi deseo de que este espacio se convierta en mi pequeña biografía, ni sistemática ni exhaustiva, realizada con la colaboración de quienes me siguieron durante años y aun se acuerdan de mí.
En estas páginas irán apareciendo historietas, dibujos -algunos inéditos- fotos, recuerdos míos y de mis colegas, etc., que igual hasta interesan a quienes han escrito sobre mis "monos" echándome tantos piropos que me sonrojaría si eso fuese posible.
Hasta otro rato.
miércoles, 15 de junio de 2011
domingo, 5 de junio de 2011
Hola: Soy Darío Gordillo, dibujante de historietas. En breve comenzaré a dar forma a este blog desde la otra vida, que no está presidida por un señor barbudo rodeado de niños con alitas (siento desilusionar a algunos) sino que es binaria y está llena de ceros y unos, lo que, en todo caso, tiene más que ver con el cielo visto por los orientales (por lo del ying y el yang).
Por cierto: en esto de lo binario los viejos dibujantes de historietas hemos sido precursores, ya que nos hemos expresado siempre con tinta china sobre papel más o menos blanco. Para los grandes maestros, de Will Eisner a Alex Raymond o mi querido amigo Víctor de la Fuente, el color siempre fue un incordio.
Y por hoy nada más.
Un saludo y hasta pronto.
Por cierto: en esto de lo binario los viejos dibujantes de historietas hemos sido precursores, ya que nos hemos expresado siempre con tinta china sobre papel más o menos blanco. Para los grandes maestros, de Will Eisner a Alex Raymond o mi querido amigo Víctor de la Fuente, el color siempre fue un incordio.
Y por hoy nada más.
Un saludo y hasta pronto.
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